Aunque en lecciones anteriores he tratado este tema, me ha parecido interesante profundizar un poco más en él. Vamos a ver qué es una recesión económica, en qué se diferencia de una desaceleración y de una depresión. Sabremos la aportación que NBER hace a la definición de recesión, conoceremos las últimas que ha habido y las más intensas en la historia, sabremos cómo ha reaccionado la Bolsa históricamente a las recesiones y veremos los diversos indicadores que avisan de su llegada.

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Qué es una recesión económica

Es importante distinguir entre varios conceptos:

– Desaceleración económica: se produce cuando la actividad económica empieza a debilitarse de un mes a otro mes. Cuando hablamos de una desaceleración nos estamos refiriendo a una reducción del ritmo de crecimiento.

– Recesión: la definición clásica y ortodoxa de recesión económica es cuando en un país el Producto Interior Bruto (PIB) cae como mínimo durante dos trimestres seguidos. En este caso cae la producción, la renta, la riqueza nacional y el poder adquisitivo.

– Depresión económica: el empleo es el gran perjudicado y el cierre de empresas es una constante. Se habla de que estamos en una depresión económica cuando el PIB cae un 10% o más en un año o bien cuando estamos ante una recesión prolongada durante más de tres años y la actividad económica no muestra síntomas de mejora.

Por tanto, hay dos criterios a la hora de diferencias entre depresión y recesión: la caída del PIB mayor al 10%, o que la recesión  se prolongue al menos durante tres años.

Sea como fuere, siempre ha habido polémicas con todas estas definiciones, ya que no existe unanimidad entre la comunidad económica.

En el caso de la definición de recesión económica, más aun si cabe y aquí entra en escena el NBER.

El NBER se creó hace más de 100 años, es la Oficina Nacional de Investigación Económica, una organización de investigación privada, sin fines lucrativos y que tiene como objetivo promover una mejor comprensión de cómo funciona la economía.

Pues bien, NBER nunca ha estado de acuerdo con la definición clásica de recesión de caída del PIB durante al menos dos trimestres seguidos, ya que considera que es muy simple y no refleja la realidad. En su lugar, analiza más variables, no solo el PIB, como por ejemplo las nóminas no agrícolas, la producción industrial, las ventas al por menor, los ingresos, los PMI de servicios y manufacturas, etc.

Las recesiones económicas a lo largo de la historia

En los últimos 146 años la economía norteamericana ha visto llegar 14 recesiones que son las siguientes:

– Año 1.876: inundó a Estados Unidos y Europa.

– Año 1.885: está considera como la 3ª mayor recesión.  

– Año 1.893: el desempleo en EE.UU aumentó mucho.  

– Año 1.908: considerada como la 2ª mayor recesión.  

– Año 1.914: la sinergia con el inicio de la Primera Guerra Mundial hizo que fuese intensa.

– Año 1.917-1921: vino a coincidir con la recta final de la Primera Guerra Mundial.

– Año 1.930-1.932: considerada la mayor recesión histórica.

– Año 1.938: recordada como una de las peores.

– Año 1.945-1.946: detrás estuvo la Segunda Guerra Mundial y asoló a EE.UU y Europa.

– Año 1.975: conocida como la recesión de la década de los 70. 

– Año 1.982: duró de finales de los 70 hasta el comienzo de los 80.

– Año 1.991: los responsables fueron los bancos centrales con sus estrategias monetarias.

– Año 2.009: la crisis de las hipotecas de alto riesgo estuvo detrás. Afectó al mundo entero.

– Año 2020: la pandemia del coronavirus Covid hizo que se cerrasen todos los países y las economías sufrieran mucho.  

Relación de la Bolsa ante recesiones

Atendiendo a lo que ha hecho a lo largo de la historia el índice S&P 500 ante las recesiones económicas, podemos ver ideas interesantes.

Por ejemplo, en los últimos 72 años, el S&P 500, cuando ha habido recesiones, cayó de media un -2,1%. Eso sí, hubo por ejemplo algunos años de recesiones en los cuales las caídas llegaron a ser mayores del -30%, como sucedió en 2007 y en 2020.

Indicadores que avisan de una recesión

Existen una serie de ratios y de indicadores que suelen avisar y dar pistas fiables de la llegada de una recesión económica.

Entre los principales tenemos los siguientes:

–  ISM Manufacturero: es un  indicador adelantado del sector manufacturero que se publica el primer día hábil del mes posterior al mes del informe a las 16:00 hora española. Consiste en una encuesta a más de 300 gerentes de compra de 50 estados. Un dato por encima de 50 implica expansión económica, un dato por debajo de 50 implica contracción económica. Si baja por debajo de 45 y permanece un tiempo así, mala señal.

– El índice de Tendencia Económica (ETI): este índice rastrea y sigue la evolución de 14 indicadores que ofrecen una radiografía bastante realista de la economía. Si el índice está por encima de 50 es buena señal, pero si está por debajo de 50 indica llegada de recesión.

– El índice SKEW: calibra el sentimiento. Su interpretación es sencilla, cuanto más suba mayor será la expectativa de que haya recesión. Los valores varían de 100 a 150 puntos. Lo ideal es que esté en 100 puntos. Su rango habitual cuando todo está en orden  se sitúa en 100-120 puntos.

– El índice Báltico: mide la evolución del transporte marítimo de las principales materias primas. Es clave porque refleja la demanda real de materias primas y la cantidad de contratos de envío de mercancías que se cierran en las principales rutas marítimas mundiales. Si este índice sube significa que la demanda de materias primas aumenta y por tanto  el crecimiento económico internacional.

– Permisos de construcción residencial: muestran el número de permisos para nuevos proyectos de construcción emitido por el Gobierno y son los principales indicadores de la condición del mercado de la vivienda. Es uno de los mejores indicadores históricos de la actividad económica.

– Curva invertida de rendimiento: se produce una curva de rendimiento invertida cuando el rendimiento de los bonos de corto plazo es mayor que el rendimiento de los bonos de plazo mayor. Suele ser un indicador adelantado de la llegada de una recesión económica. Desde que avisa de la llegada de una recesión hasta que ésta se confirma oficialmente suelen pasar 1-2 años.

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