Hoy te voy a explicar el secreto del Dax para subir pese a una economía lastrada. Marcó máximos históricos la pasada semana y la economía germana volverá a contraerse.
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El secreto del Dax para subir pese a una economía lastrada
Una pregunta que me suelen hacer últimamente es por qué la Bolsa alemana, el índice Dax, está tan fuerte este año si la economía del país no está precisamente bien y a corto plazo no se espera un cambio de rumbo.
Me ha parecido interesante tratar este tema aunque usted no invierta en la bolsa germana, más que nada de cara a explicar algunas cosas, porque siempre es bueno adquirir más conocimientos e ir teniendo un buen bagaje cultura financiero.
Vamos a ver, la economía alemana es la más importante de toda Europa y su índice bursátil, el Dax, es el más relevante, aparte del Eurostoxx 50 (nació en 1998 y está formado por las 50 empresas europeas líderes en capitalización bursátil y que brillan por su enorme liquidez, siendo los principales países de esas compañías Alemania, España, Francia e Italia) y el Stoxx 600 (este índice está formado por las 600 compañías europeas de mayor capitalización bursátil repartidas por 17 países, siendo los principales Alemania, España, Francia, Italia, Suecia, Suiza).
El Dax sube en lo que llevamos de año casi un 18% y la pasada semana marcó nuevos máximos históricos. Hasta aquí no debiera de sorprendernos nada, puesto que los las Bolsas de Europa y de Estados Unidos también suben con fuerza este año, salvo el Cac francés que apenas sube un 1%.
Pero si analizamos la economía alemana y los datos macro, la cosa cambia, puesto que no esta bien y seguirá así todavía por un tiempo. Tengamos en cuenta que la producción del país asistió a una contracción el año pasado y este mismo mes de octubre el Gobierno reconoció que prevé para el 2024 otra nueva contracción, en este caso del -0,2%.
¿Por qué está la economía en esta situación? La respuesta es China. Sí, porque el gigante asiático es el 4º mayor socio comercial de los alemanes (por detrás de Estados Unidos, Francia y los Países Bajos). Es decir, Alemania tiene una mayor exposición en China que el resto de sus homónimos europeos. Y ya sabemos la crisis por la que atraviesa la economía china. Por tanto, si a China le va mal económica, a los alemanes también, así de sencillo.
Es cierto que el Gobierno chino ha decidido hace pocas semanas tomar cartas en el asunto e implementar una serie de medidas para reconducir su maltrecha economía, como por ejemplo un nuevo gasto público y bajar los tipos de interés, pero los resultados aun tardarán en dar sus frutos y más todavía para que se empiecen a apreciar en Alemania.
Vale, ya sabemos por qué la economía alemana no está bien. ¿Pero, cómo pese a ello el Dax está tan fuerte? Porque evidentemente no es por las medidas anunciadas por el Gobierno chino, ya que éstas se comunicaron hace pocas semanas y el Dax viene subiendo con fuerza desde mucho antes.
Pues la respuesta es sencilla. Sectores que tienen un peso relevante en el Dax, como por ejemplo los fabricantes de coches, el sector de maquinarias y las empresas farmacéuticas no dependen demasiado del devenir de la economía local de Alemania para poder seguir creciendo. Sobre todo dependen de las exportaciones a otros países.
Por tanto, esos sectores con peso importante en el Dax obtienen buena parte de sus ganancias en otros países y no en Alemania, sobre todo en Estados Unidos. Es por ello que aunque la economía del país no atraviese su mejor momento, las compañías de esos sectores no se ven demasiado afectadas negativamente hablando.
Y bueno, podríamos añadir también otro motivo más. Las acciones del Viejo Continente en general son más baratas que las acciones del otro lado del Atlántico. Como prueba tenemos que las compañías del S&P 500 cotizan a 22 veces, mientras que las europeas lo hacen a 14 veces, nada más y nada menos que 8 puntos de diferencia que es bastante.
Pues ya sabe el secreto del Dax para subir pese a una economía lastrada. Espero que, pese a que no le interese la Bolsa alemana, le haya resultado interesante la información.